Consejos para Viajar a Bolonia – Que tenés que hacer en Bolonia

Ahorra En Tu Viaje

Viajar a Bolonia es viajar a una ciudad que encapsula la esencia de Italia con sus ricas tradiciones culinarias, impresionante historia y vibrante vida cultural, es una parada obligatoria para cualquier viajero.

Conocida como “La Dotta, La Rossa, La Grassa” (la culta, la roja, la gorda), Bolonia ofrece una experiencia única que se distingue por su academia, sus tonalidades rojizas y su exquisita gastronomía. Aquí te dejo algunos consejos esenciales para aprovechar al máximo tu visita a esta magnífica ciudad.

Puntos Importantes

Ubicación y Accesibilidad

  • Bolonia está estratégicamente situada en el centro de Italia, haciendo de ella un núcleo neurálgico de comunicaciones entre el norte y el sur, y entre el oeste mediterráneo y el este adriático.
  • Es la capital de Emilia-Romaña, dotada de un aeropuerto importante y una estación de trenes central, además de ser un punto de encuentro de cuatro autopistas principales.

La Dotta (La Culta)

  • La Universidad de Bolonia, fundada en 1088, es reconocida como la universidad más antigua del mundo occidental, simbolizando el legado intelectual y cultural de la ciudad.
  • Personalidades históricas como Dante Alighieri estudiaron en esta institución.
  • La ciudad está famosa por sus “soportales” o arcadas, que suman casi 40 kilómetros y han sido declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

La Rossa (La Roja)

  • La arquitectura de Bolonia destaca por sus tonalidades rojizas, resultado del uso del ladrillo y del yeso rojo y amarillo en sus edificaciones.
  • Bolonia tiene un fuerte legado político y cultural, con una historia de activismo y un fuerte apoyo a los partidos de izquierda.
  • La proximidad a Maranello, hogar de Ferrari, añade otra dimensión al apodo “La Rossa”, relacionándolo con el mundo del automovilismo y el diseño italiano.

La Grassa (La Gorda)

  • Bolonia es célebre por su rica tradición culinaria, ofreciendo platos emblemáticos como los tortellini, la mortadela y el ragú alla bolognese.
  • La ciudad es considerada un paraíso gastronómico, reflejando la importancia de la comida en la cultura local y atrayendo a foodies de todo el mundo.

Consejos para Viajeros

  • El Marconi Express conecta el aeropuerto con el centro de la ciudad en 7 minutos, ofreciendo un acceso rápido y cómodo para los visitantes.
  • Explorar Bolonia a pie es altamente recomendable, especialmente a través de sus históricos soportales, que no solo son bellísimos sino que también proporcionan protección contra el clima.
  • La ciudad es un importante cruce de caminos en Italia, lo que facilita las excursiones de un día desde y hacia otras ciudades italianas destacadas.

Cómo Llegar a Bolonia

La autopistas de Bolonia

Llegar a Bolonia es sorprendentemente fácil gracias a su ubicación estratégica en el corazón de Italia y su excelente red de transportes. Aquí te explico las mejores maneras de llegar a esta encantadora ciudad, ya sea por aire, tren o carretera.

Por Aire

El Aeropuerto Internacional Guglielmo Marconi (BLQ) es la principal puerta de entrada aérea a Bolonia. Ubicado a solo 6 km del centro de la ciudad, ofrece vuelos desde y hacia numerosos destinos tanto europeos como internacionales. Una vez en el aeropuerto, la manera más rápida y conveniente de llegar al centro es mediante el Marconi Express, un servicio de tren ligero sin conductor que te lleva a la estación central de Bolonia en aproximadamente 7 minutos. Es una opción moderna, eficiente y ecológica para iniciar tu aventura en la ciudad.

Como llegar a Bolonia

Por Tren

Bolonia se encuentra en un punto neurálgico del sistema ferroviario italiano, haciendo que la estación central de Bolonia, Bologna Centrale, sea una de las más transitadas del país. Esta estación ofrece excelentes conexiones con las principales ciudades italianas como Roma, Milán, Florencia y Venecia, así como con destinos internacionales. Llegar al corazón de Bolonia desde la estación central es tan fácil como dar un paseo de unos minutos, lo que te permite sumergirte de inmediato en el encanto de la ciudad.

Por Carretera

Bolonia es accesible por carretera desde cualquier dirección gracias a su red de autopistas. La Autopista A1 (Autostrada del Sole) conecta Bolonia con Milán en el norte y con Florencia, Roma y Nápoles en el sur. La A14 enlaza con la costa adriática, mientras que la A13 te lleva directamente desde Venecia. Conducir hasta Bolonia te ofrece la libertad de explorar a tu propio ritmo, y la ciudad cuenta con varios estacionamientos bien situados, aunque explorar el centro histórico a pie es la mejor opción una vez que llegues.

Que hacer en Bolonia

La Dotta: Una Ciudad de Sabiduría y los Emblemáticos Soportales de Bolonia

La universidad de Bolonia

Bolonia, conocida afectuosamente como “La Dotta” por su profundo legado intelectual, alberga la Universidad de Bolonia, considerada la institución de educación superior más antigua del mundo occidental. Fundada en 1088, esta prestigiosa universidad no es solo un centro de excelencia académica, sino también un símbolo de la rica herencia cultural de la ciudad. La influencia de la universidad permea cada rincón de Bolonia, creando un ambiente vibrante donde el pasado y el presente se encuentran.

Los Soportales

Los portales de Bolonia

Uno de los rasgos más característicos y encantadores de Bolonia son sus soportales, o “portici”, que se extienden por casi 40 kilómetros a lo largo de la ciudad. Estas estructuras arquitectónicas no solo ofrecen refugio del sol veraniego y de las lluvias ocasionales, sino que también invitan a pasear y contemplar la belleza de Bolonia a un ritmo tranquilo. Los soportales de Bolonia han sido reconocidos por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad, un merecido reconocimiento a su importancia cultural y arquitectónica.

Caminar bajo los soportales es como viajar a través del tiempo. Iniciados en el siglo XI para acomodar el crecimiento de la población estudiantil y académica, los soportales se convirtieron en un elemento esencial de la planificación urbana de Bolonia. Permitieron la expansión de las viviendas y los espacios públicos sin sacrificar la accesibilidad y la interacción social. Hoy, estas columnatas no solo son un lugar de tránsito; son espacios de encuentro, de comercio y de vida cotidiana, vibrantes con el ir y venir de estudiantes, locales y turistas.

Las Dos Torres

Las torres de Bolonia

Dentro del laberinto de calles y soportales, se erigen orgullosas las Dos Torres de Bolonia, la Garisenda y la Asinelli, como guardianes de la historia de la ciudad. Estas torres medievales, que en su momento simbolizaban el poder y el prestigio de las familias nobles boloñesas, hoy son icónicos puntos de referencia para cualquier visitante. Aunque actualmente estén cerradas por mantenimiento, su sola presencia añade un toque de misterio y grandeza al paisaje urbano.

La Torre Asinelli, la más alta con sus impresionantes 97,6 metros, ofrece una oportunidad única (cuando está abierta al público) para contemplar Bolonia desde las alturas. Ascender sus escaleras es un viaje en sí mismo, culminando en una vista panorámica donde los soportales, las plazas y los tejados rojizos se extienden hasta donde alcanza la vista, un recordatorio tangible de la historia viva de Bolonia.

La Rossa: Los Colores de Bolonia y el Fervor de Una Ciudad Vibrante

Bolonia

Bolonia, conocida como “La Rossa” por sus característicos tonos rojizos, es una ciudad que captura la esencia de Italia no solo a través de su rica historia y su prestigioso legado académico, sino también por su vibrante paleta de colores y su apasionante historia política y cultural. Este sobrenombre encierra mucho más que una simple descripción cromática; es una ventana al alma de Bolonia, reflejando su ardiente espíritu y la calidez de su gente.

Un Mosaico de Colores

Los edificios de Bolonia, desde sus estructuras medievales hasta las modernas, están bañados en una gama impresionante de rojos y amarillos. Esta singularidad arquitectónica no es casualidad; es el resultado de siglos de historia, donde el uso del ladrillo y del yeso ha pintado un lienzo urbano que cambia con la luz del día, ofreciendo vistas espectaculares en cada esquina.

La mejor manera de apreciar esta sinfonía de colores es desde lo alto de la Torre Asinelli, el punto más elevado de la ciudad, desde donde se pueden contar los más de 350 tonos que decoran sus fachadas.

Un Símbolo Político y Cultural

El color rojo de Bolonia también hace eco de su vibrante historia política. Durante décadas, la ciudad ha sido un bastión de ideas progresistas y un hervidero de actividad política, siendo el rojo un símbolo del compromiso de sus habitantes con la justicia social y la igualdad. Este fervor político se manifiesta no solo en las discusiones de sus plazas y cafés, sino también en el arte y la cultura que impregnan sus calles, desde murales hasta exposiciones que reflejan la pasión de Bolonia por el debate y el cambio.

La Pasión por la Velocidad

La cercanía de Bolonia a Maranello, hogar de Ferrari, añade otra dimensión al apodo “La Rossa”. Esta proximidad geográfica simboliza la pasión de la región por la velocidad, el diseño y la excelencia en la ingeniería automotriz. L

os boloñeses comparten un orgullo por la tradición italiana de coches de lujo, que no solo se ve reflejada en la economía local, sino también en la cultura popular y en la vida cotidiana de sus habitantes. Ferrari, con su emblemático color rojo, es un emblema de lujo y rendimiento que resuena con el espíritu vibrante y dinámico de Bolonia.

La Grassa: El Paraíso Gastronómico

En el corazón de Emilia-Romaña, Bolonia se erige orgullosamente como “La Grassa” (la gorda), un sobrenombre que celebra su estatus como uno de los destinos culinarios más exquisitos de Italia. La cocina boloñesa, con su enfoque en ingredientes de la más alta calidad y recetas que han sido perfeccionadas a lo largo de siglos, invita a una exploración sensorial única, donde cada bocado cuenta la historia de la rica tradición gastronómica de la región.

Los Sabores de Bolonia

Que comer en Bolonia

Los platos tradicionales, como los tortellini rellenos de una mezcla perfumada de carne y queso, servidos en un caldo claro o con crema, son el epítome de la cocina casera, convertidos en obras de arte culinario. La mortadela, suave y aromática, cortada en rodajas finas, es un testimonio de la habilidad boloñesa en la charcutería, desafiando cualquier preconcepto sobre este humilde embutido.

Comer en Bolonia

Sin embargo, es el ragú alla bolognese, esa lenta cocción de carne finamente picada, vino, verduras y tomate, servida tradicionalmente con tagliatelle, lo que realmente encapsula el espíritu de “La Grassa”. Este plato, conocido y amado en todo el mundo, es una expresión de simplicidad y profundidad de sabor, simbolizando la esencia de la cocina boloñesa: la transformación de ingredientes básicos en algo sublime.

Más que Comida: Una Cultura de Hospitalidad

La cocina de Bolonia refleja la hospitalidad y el calor de sus habitantes. Comer aquí es una experiencia compartida, un momento de unión y de disfrute colectivo.

Las osterias y trattorias de la ciudad, con su atmósfera acogedora y mesas llenas de platos para compartir, son el escenario perfecto para sumergirse en la cultura local. Estos establecimientos, a menudo regentados por familias que han pasado sus recetas de generación en generación, ofrecen no solo una comida, sino una ventana a la vida boloñesa.

Reserva tus actividades

Posts Relacionados

d
Emilia-Romaña

Donde está Ferrara

Donde está Ferrara. Una ciudad pequeña pero hermosa, los visitantes encontrarán muchos monumentos históricos que aluden

Conocer mas

Acerca Del Autor

Soy Matias de Vivo de Viajes un Argentino / Italiano viviendo en Alemania desde hace casi 20 años.
Viajo todo lo que puedo, hago notas y a mi regreso las vuelco en videos y guías que te pueden ayudar a planificar “tu viaje”.